Si descubrir los sabores tradicionales del lugar está entre tus experiencias "obligadas", Sevilla tiene todas las posibilidades de convertirse en uno de tus viajes más memorables. La gastronomía sevillana es tan rica y diversa que cualquier persona puede encontrar algo para disfrutar de esta fascinante aventura culinaria.
Siendo una de las ciudades más bellas del mundo y con un gran patrimonio cultural e histórico, Sevilla es también una de las mayores capitales gastronómicas. Así que no es de extrañar que la comida sea aquí el centro de atención.
Cuando estés en Sevilla, verás que la gente prefiere comer fuera. Este hecho refleja perfectamente los valores fundamentales de la ciudad, como la importancia de la socialización, disfrutando de su caña de cerveza en buena compañía. Así que la mejor manera de enamorarte de su gastronomía es salir y ocupar tu lugar en algún bar lleno de locales.
En cuanto a la cocina tradicional sevillana, es importante saber que Sevilla tiene una ubicación privilegiada entre la sierra y la costa del Atlántico. Por eso, los platos sevillanos representan una fusión ideal de verduras, pescado fresco y carne de alta calidad. Además, no te olvides de probar sus vinos locales, ya que Sevilla puede competir perfectamente con las regiones españolas más famosas como Rioja o Ribera del Duero.
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Son muchos los platos tradicionales de los que puedes disfrutar al visitar Sevilla. Sin embargo, la mejor manera de vivir la experiencia es probando estas 5 comidas típicas sevillanas, tan queridas por la gente de aquí. ¡Disfruta!
Todo el mundo sabe que un buen desayuno es la mejor manera de empezar el día. Aunque el desayuno no es la comida más importante en Sevilla, algunos platos merecen tu atención.
Hablando de los desayunos más populares no podemos olvidarnos de la tostada. Es algo muy típico en todo el país, pero cada región tiene sus preferencias en cuanto a pan y aderezos. En Sevilla, puedes ver muchos bares que sirven tostadas con tomate y/o jamón.
Otra comida típica sevillana para empezar el día son los churros. Es posible que ya hayas oído hablar de esta comida, ya que es bastante popular no sólo en España, sino también en distintos países de América Latina. Los churros en Sevilla también se conocen como calentitos, ya que aquí es más típico comerlos cuando están recién preparados y muy calientes.
Los churros son tiras de masa frita en aceite de oliva. Hay diferentes tipos, los más populares son los gordos llamados churros de rueda y los pequeños y acanalados, llamados churros de papa. En Sevilla se comen con azúcar o chocolate caliente.
Sevilla es mundialmente famosa por su cultura de la tapa, así que no puedes irte de la ciudad sin probar alguna.
El concepto de tapa puede ser confuso, sobre todo si ya has visitado otras regiones españolas. A menudo la gente espera encontrar un trozo de pan con diferentes ingredientes, ya que en el centro y en el norte del país estos entrantes se llaman "tapas" o "pintxos". Sin embargo, la tapa en Sevilla no es un tipo de comida, sino el tamaño de la ración. “tapas” o “pintxos”. However, tapa in Seville is not a kind of food, but portion size.
La tapa es la porción más pequeña que puedes encontrar en Sevilla. Hay muchos platos tradicionales que se sirven como tapas. Los más recomendables son solomillo al whisky (pork in whiskey), espinacas con garbanzos (spinach and chickpeas), rabo/cola de toro (bull´s tail), gazpacho (tomato soup) and ensaladilla rusa (Russian salad).
Al estar muy influenciada por la famosa dieta mediterránea, la comida típica sevillana sorprende con un gran número de platos fritos tradicionales, especialmente el pescado frito. Muchos bares y restaurantes tienen este tipo de comida en su carta. Por ejemplo, es muy típico encontrar calamaresfritos y boquerones.
Otra opción popular (y la más original) es el cazón en adobo, un tiburón de arena en un adobo moruno de comino, orégano, vinagre y limón. Este plato tiene un sabor y un olor sorprendentemente fuertes, y la razón es bastante sencilla: hace unos siglos, encontrar pescado fresco en la ciudad, situada tan lejos de la costa, era un verdadero desafío. Así que la forma más fácil de consumir pescado y marisco era freírlo, utilizando mucho vinagre para ocultar el mal sabor y el olor. Por supuesto, la cocina sevillana actual no utiliza productos de mala calidad o en mal estado, pero la tradición de preparar el pescado frito con este fuerte sabor a adobo sigue muy viva.
Si no eres muy aficionado al pescado y al marisco, hay otro plato frito imprescindible, muy querido por los sevillanos. Este plato se llama croqueta, que es una especie de albóndiga de carne, pescado o verduras con salsa bechamel, empanada y frita.
Los sevillanos pasan la mayor parte de su vida en los bares, donde la cerveza es el rey, y la comida sólo acompaña a la bebida. Por eso, la comida callejera rápida y fácil de preparar, como los montaditos y los serranitos, es uno de los pilares de la cocina local.
El serranito es una especie de bocadillo, hecho con una crujiente baguette casera, carne de cerdo, jamón serrano, tomate, pimiento verde frito y alguna salsa. A veces también puede llevar una tortilla francesa. Además, en muchos lugares puedes encontrar distintas variedades de serranito, por ejemplo, una versión con pollo.
El montadito es otro tipo de bocadillo sevillano, que puede contener muchos ingredientes diferentes. Los más comunes son el solomillo (cerdo), el jamón (jamón serrano) y la tortilla de patata. Hay otro ingrediente que es muy típico del montadito en Sevilla. Muchos bares locales ofrecen montaditos de pringá, los restos de carne del guiso de puchero.
Cuando hablamos de los dulces tradicionales sevillanos, debemos recordar tanto la época en que la región fue conquistada por los musulmanes como la Semana Santa católica. La cocina andaluza heredó la forma de elaborar los dulces árabes de la época andalusí, crujientes, utilizando miel, jarabes de azúcar y canela. Este legado se integró tan profundamente en la sociedad, que los actuales dulces tradicionales de Semana Santa, también conocidos como dulces de convento, están influenciados por él.
Si quieres probar algunos dulces tradicionales, los más típicos son las torrijas, los pestiños y las yemas.
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Artículo de: Sevilla Free Tours
